martes, febrero 21, 2006

crítica (continuación)

"(...) Episodios anacrónicos donde, con ligereza, se mezcla el pasado con el presente; una dudosa antropología en tono de moraleja; tristes apelaciones a la sabiduría del evangelio; una historia de infidelidad y fragmentos de diálogos amputados - diálogos de sordos – conforman la espesa y ambigua trama de este, insisto, lesivo relato. Pepe Trueno - como el peor de los alumnos, el más indeseable - no sólo no termina de aprender nunca la lección sino que, además, presenta una irrespetuosidad pasmosa, un descaro sin motivos ni precedentes.

Meta la oreja en un panal de abejas, hágase un sándwich con esa mortadela vencida que tiene en la heladera, ponga un disco de Ricardo Montaner o alquile la última de Adam Sandler, pero no lea a este tipo. Quiérase un poquito…"